14 junio, 2008

La Eurocopa a ritmo de tulipán

Holanda no falla. Despés de que Alemania decepcionara, Italia fracasara y Portugal dudara, las miradas se dirigían a la naranja mecánica para ver hasta dónde podía dar. Y ha demostrado que llegará hasta donde le dejen. Humilló a los franceses con un contundente 4-1.

El fútbol con ritmo es un baile perfecto. Esta noche los franceses bailaban con la más bella, con Holanda. Después de su pobre empate contra Rumanía, estaban obligados a ganar o al menos sacar algo positivo, más aún tras la sorpresa que los rumanos nos han deparado esta tarde con los vigentes campeones mundiales. Domenech no se reservó nada: Henry y Ribery tenían que devolver la gloria al imperio francés.

En esta edición hay selecciones buenas y selecciones no tan buenas, pero Holanda está en otro mundo. El conjunto de Marco Van Basten tenía la oportunidad de demostrar sus galones y su poderío. Y lo haría ante un grande, ante la bicampeona de Europa y la que fuera campeona mundial.

Su juego encandila a todo aquél que tenga buen gusto. En el campo son un equipo con mayúsculas, ayudando en defensa y acompañando en ataque como si se tratara de once jugadores remando hacia un mismo destino. No titubean con el esférico: saben lo que quieren y saben hacer lo que desean. Exactamente igual a como lo hicieran entonces sus antecesores: los Gullit, Rijkaard, Overmas o el mismísimo Johan Cruyff. Es imposible pararlos.

Francia lo intentó, pero se vio superada y dominada desde el minuto uno del partido. En el minuto 9, Holanda ya se adelantó en el marcador tras un gol de Kuyjt tras rematar libre de marca un balón de cabeza. Los tulipanes, sin complejos, mandaban en el marcador y en el terreno de juego, con un estadio plagado de camisetas naranjas volcadas con sus jugadores.

Su juego es perfecto. Toque y toque con profundidad, con mordiente. Un cuadro que cuando mete la directa no hay quien la frene. Van der Vaart organizando y Sneijder y Kuijt desbordando a todos sus rivales, con el killer R. Van Nistelrooy patrullando en el área y recogiendo cada balón. Una defensa segura con un portero veterano. Y la pieza mágica: un hombre en la banda moviendo a sus jugadores como si se tratase de una partida de ajedrez llamado Marco Van Basten. Al final, siempre consigue el jaque mate.

Esa sería la primera mitad. Una Francia peleona pero arrollada por una Holanda en busca de matar el partido en una contra vertiginosa. Ribery sería el mejor de los franceses, tocados y casi hundidos tras el gol de Holanda y que los ponía contra las cuerdas, al lado de sus "amigos" los italianos.

La segunda mitad se presuponía más emocionante todavía. El espectáculo que estábamos viviendo no daba tregua y se preveía que Francia tendría que buscar más e ir a por el empate. Holanda no se arrugó, le gustó esa presión y controló el partido. Con este juego además de pasar a la siguiente ronda se estaba ganando el respeto de los demás equipos.

El partido se abriría, lo que beneficiaría mucho a los recién invitados al partido, Robben y V. Persie, dudas y tocados hasta el último partido. Esta sería la dinamita que tenía preparada Holanda para acabar con el partido. La velocidad endemoniada de uno y de otro volvió loco a los franceses, que empezaban a dar muestras de cansancio y de resignación.

Y allá fueron los tulipos, lejos de dar un paso hacia atrás y recular el partido, se vinieron arriba, y de esa forma se sentencian los partidos. Golazo de V. Persie que resume qué es Holanda en esta Eurocopa: tras una ruleta de V. Nisterlrooy, al más puro estilo Zidane, y tras un pase en profundida a Robben (entre madridistas andaba el juego) este pone un centro perfecto al área pequeña y el jugador del Arsenal fusila al portero francés. En dos toques llegan al área rival y de un tiro certero perforan la malla del guardameta. Parecía lo más sencillo del mundo. Y todo el estadio puesto en pie ante estos jóvenes holandeses que van camino de escribir una página en la historia del fútbol.

Pero Francia pareció despertar y en un buen tanto del cuestionado Henry, tras remate típico de un delantero centro, metía la emoción en los cuerpos. Apenas segundos duró esa reacción, porque la promesa de Ramón Calderón, Robben, se inventó un chut casi sin ángulo que hace subir el tercero en la cuenta de Holanda. No se lo podía creer el jugador merengue. Fin del suspende en esta película cuyo protagonista principal sería el equipo holandés.

Y por si alguien se había quedado con ganas de más, la guinda del pastel, Otro madridista, el que faltaba, Sneijder, engancha una vaselina a la media vuelta que puso el cierre a un encuentro espectacular con un gol de ensueño.

Holanda, primera de grupo y hasta que no se demuestre lo contrario el rival a batir. Su juego, su ímpetu y su sensación de colectivo la hacen ser una seria candidata para esta Eurocopa 2008. Es la más regular y la más contundente: 2 partidos, 6 puntos, 7 goles a favor y un solo tanto en contra. Holanda huele a campeona.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Hola tocallo, mi más enhorabuena por el Blog lo primero, y sobre todo por este artículo.

Sin duda en esta Eurocopa la flor predominante es el tulipán, aunque esperemos que sea también el girasol español.

Holanda esta rompiendo los esquemas de grandes selecciones como Francia e Italia, las cuales si la "naranja mecánica" lo decidiera serian mañana apeadas de la competición. Veamos a ver que pasa ya que todos los españoles estamos atentos a ese grupo.
La verdad las 3 selecciones que nos podemos encontrar en cuartos me parecen dificiles pero Rumanía me gusta más, sobre todo por la experiencia de la Azurra y de los galos en este tipo de campeonatos.

Un saludo a todos y en especial a tí Carlos.

Todos con España!!!