14 noviembre, 2008

                                           ¿Hacia dónde se dirige Europa? Foto: Carlos F.

 ¿SENTIMIENTO EUROPEO?

En una conversación de sobremesa, taza de té con leche en mano y al norte de Inglaterra, me comentaba Mr. Ian: "¿Europa?- En nuestro mapa aparece a un lado Inglaterra, a otro Europa y más lejos China. Nosotros estamos a parte". Esta frase dice mucho. 

La UE nació a principios de la década de los 90 con la firma del Tratado de la Unión Europea y siendo sucesora de las Comunidades Europeas creadas en los años 50. ¿Por qué nacieron dichas Comunidades? La II Guerra Mundial había desolado a vencedores y vencidos y había que apoyarse en los intereses económicos comunes para garantizar una reconstrucción del viejo continente europeo. Si con mi vecino tengo un contrato firmado gracias al cual estoy dando de comer a mis ciudadanos, no sería bueno entrar en conflicto con él porque correría el riesgo de perderlo todo. Y si mi vecino piensa igual, la paz está garantizada en pro de un desarrollo mutuo.
Y así el embrión de Europa fue creciendo hasta que, en la actualidad, somos 27 países que compartimos un sentimiento común. O no. Ése es el debate. Desde hace algún tiempo nos han ido vendiendo una moto que no se termina de ver plasmada en la realidad. ¿Qué es Europa? ¿Cuál es su significado?
Cuando a una pregunta le surgen numerosas y variadas respuestas es notorio que el tema no está nada claro. Y así lo hicimos reflejar buena parte de los 'ciudadanos europeos' en las votaciones del Tratado de Lisboa donde, consiguiendo la aprobación, no despertó el más mínimo interés del propio pueblo. Primero porque nuestro voz fue 'inútil' ya que se aprobó por parte del Parlamento antes de que los ciudadanos votásemos. ¿Alguien lo entiende? Preguntan qué opinamos sobre la firma de un Tratado tan trascendente pero resulta que, previamente, el Parlamento ya lo había sacado adelante. Yo pensé que el sistema funcionaba al revés y que una vez habla el pueblo, el Parlamento lo escucha y lo respalda.
El nivel de participación en España y en el resto de países fue preocupantemente bajo. Y es que aquéllo del sentimiento euorpeo tiene muchos matices.
Me parece justo y necesario que existan acuerdos entre los países europeos para olvidar y desterrar posibles revanchas del pasado. Las cuentas nunca deben ajustarse. Y creo en organizaciones que luchen por la buena sintonía y por la colaboración fuera de nuestras fronteras. Hasta éste punto, ni un pero a la Unión Europea. Pero cuando hablamos de intereses económicos y de culturas compartidas, me asaltan las dudas.
El tema de la moneda única nos tocó a más de uno el bolsillo. Los españoles funcionábamos con nuestra moneda a las mil maravillas. Nunca antes una rubia nos había hecho tan feliz. La moneda grande de 25 pts; la gorda de veinte duros; el billete de mil que no querías cambiar y que al llevarlo dobladito te hacía sentir millonario. El euro asesinó nuestra moneda y nos asfixió sobremanera. Nuestra peseta nos hacía vivir bien en España y ajustarnos el cinturón al salir al extranjero; ahora, con el euro, nos tenemos que ajustar el cinturón en Francia, Italia, Alemania... en Toledo, Badajoz y Albacete. Nuestro poder adquisitivo se fue con la rubia.
Las empresas y el sistema financiero encantados: sus transacciones se hacían más fáciles y más rentables; pero, como siempre, el 'españolito' de a pie haciendo números para llegar a final de mes. 
No puede ser que aquí venga nuestros 'hermanos europeos' con tanto dinero en el bolsillo y nosotros, cuando vamos a sus casas, hagamos cuentas porque no tenemos nada. Está claro que cada país tiene su propio poder adquisitivo; pero no menos real es que España fue uno de los países que más perdió con el cambio de moneda. Y si no, miren sus cuentas corrientes. ¿Cuánto les da de sí un billete de 5 euros? Al cambio casi unas mil pesetas...
Ése esfuerzo había que asumirlo en pro de la armonía de la civilización europea. Y yo entendía que entre los países miembros de la Unión Europea si hicieran acuerdos para fortalecernos mutuamente; de hecho, si no hubiera sido así, España no habría alcanzado el nivel de vida y desarrollo que ahora estamos disfrutando. Las ayudas de la UE fueron en su día cuantiosas y generosas para levantar un país un tanto atrasado por culpa de su pasado. Pero que dichos acuerdos tuvieran como colofón la imposición de la moneda única en Europa ya no me pareció, ni me parece, tan acertado. A los hechos me remito.
¿Qué nos une a los españoles con los ingleses? Pagan en libras, conducen por donde quieren y tienen su propio sistema métrico. A las 17 horas cierran las tiendas y a las 12 a.m. están comiendo; a las 22 horas no hay un alma en la calle. ¿Culturalmente cuál ha sido nuestra relación con Inglaterra? Si te paras a pensar tienes más cosas en común con Japón, que aunque conducen también por otro lado tienen un lenguaje donde las vocales se pronuncian, exactamente igual, que en el castellano. A, E, I, O, U. Perdonen las molestias pero servidor tiene poco que ver con un francés, con un alemán o con un holandés, por poner unos ejemplos. Y on pasa nada. Esto no quiere decir que me lleve mal con ellos. Todo lo contrario. Admiro sus culturas y respeto sus tradiciones. Cuánto más azúcar, más dulce.
Decía antes que nos intentan vender una moto que no se ve reflejada en la realidad, y parte de la misma, es hacer creer que no sentirse europeo es pecado mortal. Los pactos, las alianzas y los acuerdos económicos, políticos y sociales me parecen estupendos. Siempre escasos porque hay que unir, no alejarse. Pero siempre respetando el bagaje cultural y el contexto propio de cada país. Nosotros, en España, el euro nos ha venido francamente mal; pero sin embargo no pudimos aplazar la decisión. Inglaterra sí. ¿Por qué? ¿No somos una misma civilización?

7 comentarios:

Anónimo dijo...

Buenos días,

Vaya vaya con el sentimiento europeo...hay tanto que decir...Pero por partes. Iré de la concepción básica al análisis macro para finalizar en una visión micro de cómo veo yo el "temita".

En principio, habría que definir bien que se entiende por "sentimiento europeo". Esto supone, en principio dos puntos de partida: aquellos que creen que éste es un elemento integrador de todos los ciudadanos de los países que conforman la U.E, basado en "características comunes". Por otro lado aquellos que no creen que exista tal, o cuanto menos que ese sentimiento europeo es sólo un constructo utilizado como herramienta del marketing político que "vende" una "imagen común para los europeos".(no debería decirlo pero soy más de la segunda opción).

Pero, se acepte o no dicho sentimiento (una u otra concepción) la realidad es que este hecho no toma forma ni conciencia en los ciudadanos (ver resultados y participación en elecciones europeas o eurobarómetro-eurostat). Explicaciones varias. Yo planteo dos, a dos niveles, no como doctrina sino para generar debate. Una explicación de que ese sentimiento no cale en la población puede deberse al rechazo propio que suscita el proceso de globalización actual (basado en el neocapitalismo). Es decir, todo proceso homogeneizador suscita rechazo en las minorías que tienden a cerrarse en si mismas como mecanismo de protección. Si esto se extrapola al caso, se observa que no son minorías sino que son muchas minorías mayoritarias las que lo rechazan, cada una con su justificación (ideológica, cultural, etnica, moral,...)que coinciden en el hecho de no sentirse identificadas bajo la bandera del europeismo impulsado (y autogenerado) por las élites político-económicas europeas. La justificación de esto es expuesta por autores como Castells (concepto glocalización: hacer local lo global o de lo global lo local)y otros tantos que no mencionaré para no "aburrir" al lector.

Con esto, me aproximo más a una visión micro, donde toma relevante importancia la cuestión de los sentimientos de pertenencia de los individuos. Abandono la perspectiva europea para centrarme en el caso español, donde los sujetos (debido a su historia)se ven reaccios a imagenes identitarias comunes. Un españolito de a pie no se siente español (en la mayoría de los casos)hasta que no sale del país. En ese momento, su imagen identitaria cambia buscando los "similares" a él que serían los también españoles que viven fuera del país. Sin embargo, si este sujeto se queda aquí, su respuesta es que será de un barrio, o de una ciudad, o como mucho de una CCAA, pero es complejo encotrar sujetos que de primeras te digan: "yo soy español". Y esto no lo digo yo, lo dicen los datos que aporta y publica el INE.

El hecho de que suceda todo esto no puede ser justificado (por lo menos yo no lo intento)sólo por la historia del país, ni por el proceso de globalización o mundialización, sino que todo esto junto a otros elementos (por ejemplo culturales)suscita esa reacción. Es dificil sentirse algo que no percibes de cerca cuando, incluso con los que tienes al lado, no eres capaz de indentificarte.

Un saludo a todos/as

Alberto G
(Garci)

Pd: Si alguno tiene interés en algún punto determinado que me lo diga, que tampoco he querido extenderme demasiado...jeje!!

Anónimo dijo...

Estoy de acuerdo con tu "amplio" punto de vista; pero no menos cierto es que desde Europa, ya sea desde la perspectiva 'sentimiento' ya sea desde la óptica 'político-económica', se nos quiere embarcar en un proceso al que no quiero sumarme. ¿Qué es Europa? ¿En qué consiste el Tratado/Constitución/Texto de Europa? No quiero someterme a más derechos ni a más obligaciones, para éso disfruto y presumo de Constitución Española, que es la que tiene y debe mandar sobre mí. Unir a países como Inglaterra, Italia, Francia, España... o cualquiera de los 27 me parece una aberración. Se pueden firmar los tratados que se quieran para evitar guerras; se pueden firmar acuerdos y pactos económicos. Pero a mí, particularmente, el euro me ha tocado los 'bolsillos'.
Además es curioso, no hace mucho he viajado a Inglaterra... y vamos a hablar claro: las fronteras no han desaparecido, ahora tienen otra forma. Mira que en Inglaterra no existe DOCUMENTO DE IDENTIDAD, pues bien, tenía que ir con él para salir del país... y para entrar también.... Sé que es una tontería, pero es que no quiero ser europeo. Yo soy un ciudadano de España, que no la considero por encima ni por debajo de otras naciones. Pero aquí cada país tiene una historia, unas tradiciones y unas costumbres y yo lo tengo claro: si antes de nacer me dan a elegir, hubiera sido español infinitas veces. Por eso viene todo el mundo de vacaciones, porque la mentalidad, el ambiente y la gente que hay en España no la hay en otros lugares.

Lo que no entiendo señor García, y como experto me gustaría que me respondieras: si tú, las estadísticas, yo... y todo el mundo no cree en Europa, ¿por qué demonios hemos ratificado el Tratado? ¿Por qué?

Anónimo dijo...

Bueno, por partes. En primer lugar el problema también radica en que entendemos por "unirse" los países. Porque desde la U.E. se busca como objetivo último generar un sistema similar al de los EEUU, donde cada país mantiene unas características pero comparte otras con el resto. El verdadero problema (que tb se observa en este caso)es que no hay una "historia" común como en EEUU, sino que cada país ha estado autogenerandose a su ritmo y por diferentes caminos, con lo que encontrar algo que nos una es complejo.
El tratado europeo, lo que plantea (como idea de marketing) es más derechos y deberes para todos, buscando una identidad común que permita que todos nos "unamos" bajo el mando de la U.E. Sin embargo sólo es una unión económica, aunque se intenta, en este mundo globalizador, crear un grupo mayor que sea más competitivo que las partes.

Luego hay varias cosas que no me agradan de tu argumento. La primera es abanderar la constitución española de tal modo que pareces decir que es la mejor constitución que se pueda uno encontrar en Europa, y ahí si que difiero. No es una mierda la nuestra, pero tiene muchas cosas que mejorar, y de la puesta en común de todas ellas( en la teoría) se podría construir una mejor. Y que no se me entienda mal que no soy ni europeista ni seguidor acerrimo de nuestra constitución.

Pero los dos temas que más me chocan de lo que has mencionado son:la cuestión de que es una aberración unirse a países europeos y la de porque vienen los turistas. El primero te diré que esa misma argumentación la aplica un nacionalista catalán, gallego, vasco, o el que sea para justificar su autodeterminación. La tendencia es a "acercarse"(no se sabe cuanto) a nuestros vecinos. Además, tenemos cosas que nos asemejan como con los italianos, aunque también es muy cierto que con otros no tenemos absolutamente nada en común (a nivel "social", economico seguro que sí). El tema del turismo, pues bien, la gente viene a España basicamente por: el clima, que no es demasiado caro, servicios de atención garantizados, permisibilidad con el consumo de alcohol y drogas, ocio,...Es un producto que pocos países ofertan (aunque no se publicite obviamente de este modo). Y bueno, lo de que tu si hubieses podido escoger habrías escogido España me suena a coña, pero vale, te lo acepto, jeje!!

Finalmente, ¿porqué hemos ratificado el tratado? Me imagino que te refieres al caso particular de los españoles. Pues bien, el tema es sencillo: Por una parte, existe como "una deuda social" hacia los europeos por el capital que nos han aportado durante años, con lo que el rechazo europeista, aunque generalizado, supone más un no aprecio que un desprecio. Nos da lo mismo y no nos genera tanto rechazo como para "luchar" contra ello o "saltar". Por otro lado, la información que se facilitó y se facilita en este país sobre los procesos europeos es muy sesgada e informarse bien supone bastante más tiempo del que debiese (trabas administrativas), por lo que si sumas que la gente no se quiere implicar en cuestiones europeistas, le sumas que tampoco están muy bien informados y añades finalmente que la tendencia en la elecciones siempre es de que voten los "más conservadores" pues ese es el resultado. Quien mayoritriamente voto en las elecciones europeas eran persona adultas, trabajadoras, de corte un tanto conservador, con una alta conciencia de "deuda con europa". Además si te fijas en los argumentos que esgrimían los partidos políticos, muchos de ellos hacían incapié en esta "deuda". Las personas más críticas con el sistema, siempre tienden a movilizarse menos en las votaciones con lo que el resultado parecía obvio (y como señalo solo hablo del caso español).

¿He respondido a tus preguntas? Sino dime que aqui estoy pa lo que quieras, jeje. Ya sabes que para mí es un placer. Cuidate mucho y nos vemos.

Alberto G
(Garci)

Anónimo dijo...

No me he debido explicar bien...

Das por hecho que Europa sólo es economía, y discrepo en parte; porque de la economía se derivan numerosos derechos fundamentales que el Tratado de Europa o la futura Constitución Europea puede afectar, negativamente. Hoy por hoy, por ejemplo, se está debatiendo en el Parlamento Europeo si romper con las actuales 40 horas semanales de trabajo y pasar a 65. Eso se está debatiendo en Europa y puede ser, mañana, una realidad de España.
Cada país tiene una historia, una cultura y un bagaje, y exportar o importar aspectos tan propios a otros países me parece peligroso y poco adecuado. Si por eso me llamas nacionalista, algo pasa: o tú no me entiendes, o yo no explico.

Achacas la ratificación del Tratado (en el caso de España) al argumento más fácil: la culpa es de otros. No estoy de acuerdo Garci. ¿Por qué? Por primera vez, que yo recuerde, los medios de comunicación se volcaron de manera unánime y repartieron, GRATUITAMENTE, el propio Tratado. El problema, pienso, es que había que leérselo. Pero de éso no tiene culpa la cultura mediática de nuestro país, sino que es una especie de falta de responsabilidad del propio ciudadano, que tenía que ir a las urnas para votar no se sabe qué.

Cuando te digo que si me hubieran dado a elegir, hubiese escogido España como país propio, no te estoy engañando. Yo y mis circunstancias (que diría aquél)están muy contentas con vivir donde vivo. Económicamente nos va relativamente bien; culturalmente puedo presumir de algunos escritores, de algunos cantantes, de algunos actores (no de cine)... y aunque todo es mejorable tenemos un nivel bastante aceptable. Y no lo olvides, tenemos un sistema de seguridad social GRATUITO, lo que equivale a tener petróleo hoy por hoy...

Y en cuanto a nuestra Constitución, no presumo de tener la mejor (la democracia no es más que el sistema menos malos de los que hay) pero sí estoy tranquilo. ¿Entiendes? Todo es mejorable pero para ser la primera Constitución después de 40 años de dictadura, no está nada mal.

Y por último me gustaría que entendieras que no estoy de acuerdo con cerrar fronteras y alejarme de mis vecinos. Todo lo contrario. En mi respuesta te decía que acuerdos de paz, pactos económicos... etc... los que hicieran falta, y cuantos más mejor. Pero de ahí a ser, en el futuro, un EE.UU, NO en mayúsculas. Por lo que tú dices, porque la historia de cada país se ha ido forjando de manera particular, a ritmos distintos.
Si quiero Europa, no quiero Unión Europea.

Anónimo dijo...
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Anónimo dijo...

Jaja!! No te mosques con lo que te digo ;-) Todo lo que decía (salvo lo que esté entre comillas o parentesis) es producto de un análisis objetivo de la situación. Dentro de lo que cabe puede estar impregnado por mí, pero cuando te decía todo eso te lo intentaba explicar como científico y no comparto personalmente muchos de esos argumentos,ni hablo en primera persona.

Si que es verdad que la U.E es más que economía, pero, como intentaba decir, es dificil que en Europa no funcionen ese tipo de decisiones (más sociales) debido por ejemplo a derechos de veto de determinados países, problemas con la representatividad y poder de los diferentes países y partidos en el parlamento (no se sabe muy bien a que atiende el reparto, bueno sí, a intereses y no por poner un ejemplo al nº de habitantes...)Yo NO quiero ni mucho menos que la UE sea un EEUU, ni much9o menos y además vaticinaba entre comillas que no sería posible por las divergencias entre países. Ya sabes que soy muy escéptico con el temita europeo...

Cuando presento "los ulpables" de que en España se obtuviese dicho resultado positivo, no quiero culpar a nadie directamente, porque si lo hiciese, lo primero sería una autocrítica en los movimientos de izquierdas(en el cual me incluyo, si es que quieres que me moje, jeje)que no han sabido movilizarse, unirse e informar. Si que es verdad que se aportaba la documentación del tratado a la gente, se colgo el material en la red...pero el problema de que haya analfabetos en el mundo no es que no haya libros sino que no se les ha enseñado a leer ni hay un hábito de lectura (se entiende la metáfora?).

La gente no está "preparada" para "entender" de que va el tratado europeo, ni está "preparada" para leerse un texto denso. además, en este punto cabe resaltar que se aportaban dos tipos de información: un triptico con palabrería bonita que no decía nada en el fondo, y el documento elaborado cargado de técnicismos y lenguaje denso que hace dificil la lectura de, cuanto menos, determinados sectores de la población más desfavorecidos.

Lo de la sanidad pública y gratuita, que Dios nos pille confesado como mi amiga Espe siga con las suyas y alguien continue su patrón...( o no?). Pero te doy la razón, España tiene cosas buenas y cosas malas de ahí que aunque tengamos que aprender (incorporar) tb podemos educar (exportar).

En el tema de la constitución, de acuerdo, siempre es mejorable (aunque por mí ya va siendo hora de empezar, poco a poco a meterle mano).

Sinceramente, podríamos estar mil años con esto, puesto que no se llega a nada, y la razón de que "el gran proyecto europeo" no funcione es porque nadie se pone deacuerdo. Somos tan distintos en nuestras casas que al comparar con las del vecino la diferencia es abrumadora...Que hacer, pues no lo sé, parece ser que los "sabios europeos" siguen manteniendo el proyecto de que la UE sea un EEUU y conseguirlo muy poco a poco y "metiendonos" determinados elementos poco a poco. El euro fue su gran apuesta (pero tampoco funcionó del todo porque no todos se apuntaron), y este tratado era el segundo intentón fuerte. Asique dejaran unos meses/años hasta que se enfría la cosa y nos intentarán colgar otra cosa...(Eso creo, propia opinión, jeje)

Cuidate,

Alberto G
Garci.

Anónimo dijo...

García:
Compartimos el deseo de mejorar la Constitución española desde mañana mismo. Desconozco si la propia Constitución, que supuestamente se sustenta en valores democráticos e igualitarios, puede albergar la monarquía como forma de Estado ya que, si se paran a pensar, la monarquía no es ni democrática (yo no la he elegido) ni mucho menos igualitaria (más grave todavía teniendo en cuenta que los hombres están por encima de las mujeres). ¿Algo contradictorio no?

S.M. no se enfade conmigo si lee éste post, que sé que usted sabe encajar bien las críticas. Además, que no me cae usted mal, ni mucho menos. Lo que ocurre es que hay que ir pensando en el futuro, que creo que no pasa por su hijo y por mi "colega" de profesión... pero bueno, el tiempo dirá... ¿Vosotros qué pensáis?